Seguro que has oído hablar del peeling, puesto que es uno de los tratamientos faciales más utilizados, además de ser nada invasivo y muy efectivo. Cuando nos hacemos un peeling profesional conseguimos una descamación controlada de la epidermis y/o dermis, provocando así la regeneración de la piel.
Se trata de una técnica de exfoliación pero se realiza con productos químicos que son capaces de eliminar las células de las capas externas de la piel. Existen diferentes tipos de peeling como veremos a continuación, elegir uno u otro dependerá de la piel de cada paciente y de sus objetivos. En general, con este tratamiento podemos buscar el rejuvenecimiento facial, la eliminación de las manchas de la piel, mejorar las marcas del acné o incluso mejorar las líneas de expresión finas.
Peeling profesional ¿cuántos tipos existen?
Superficial. Es el más suave y se suele utilizar para tratar pequeñas arrugas o los problemas del acné. No es un tratamiento agresivo, por lo que se puede hacer hasta uno semanal durante un máximo de seis semanas, dependiendo siempre de las necesidades y características de cada paciente.
Medio. Con este tipo de peeling llegamos a eliminar las células de la epidermis. En este caso además de las marcas del acné y las arrugas, conseguimos tratar pequeñas manchas en el rostro. Al ser más agresivo, solo se recomienda hacer uno o dos al año.
Profundo. En este caso llegamos a eliminar algunas células de la parte inferior de la dermis. Se utiliza para eliminar arrugas de mayor profundidad, cicatrices más marcadas o manchas más acentuadas.
Hay que tener en cuenta que en todos los casos debemos protegernos del sol después de someternos a un peeling profesional, por lo que el verano no es la mejor época del año para hacérnoslo.
Si quieres rejuvenecer tu rostro, lo primero que debes hacer es acudir a Clínica Bajo para que nuestro equipo valore tu caso y conozca tus objetivos. En función de ello te recomendaremos un tipo de peeling u otro. ¡Te esperamos en el sur de Tenerife!